GUÍA DE INDICACIONES CLÍNICAS EN ONCOLOGÍA RADIOTERÁPICA
"Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo, involúcrame y lo aprendo"
B. Franklin
CÁNCER DE TIROIDES CASO CLÍNICO 2
Hombre de 52 años sin antecedentes de interés que consulta por brusco aumento de tamaño en la región cervical izquierda. El TC cervical muestra aumento de tamaño de lóbulo tiroideo izquierdo. La ecografía tiroidea confirma un nódulo sólido de 7 cm sugestivo de neoplasia. PAAF: carcinoma con rasgos medulares,
Se realizó tiroidectomía total y vaciamiento funcional del compartimento central. La anatomía patológica demostró la presencia de un carcinoma medular con persistencia de pastilla tumoral en sobre primeros anillos traqueales, no adenopatías patológicas. pT3N0M0
VALORACIÓN POR EL SERVICIO DE ONCOLOGÍA RADIOTERÁPICA
El carcinoma medular de tiroides es una forma rara de carcinoma de tiroides y representa entre 3 y 4 % de todos los cánceres de tiroides. Se presenta en dos formas: esporádica y hereditaria. En la forma esporádica, el tumor por lo general es unilateral. En la forma hereditaria (25% del total), el tumor casi siempre es bilateral. La forma hereditaria se relaciona generalmente con la presencia de otros tumores benignos o malignos en otros órganos endocrinos, afección que por lo común se conoce como síndrome de neoplasia endocrina múltiple (NEM) de tipo 2A y 2B (NEM2A o NEM2B). [8,9]
El diagnóstico se apoya también en el hecho de que el carcinoma medular segrega calcitonina, un marcador hormonal del tumor detectable en la sangre, aunque el tumor esté oculto desde el punto de vista clínico. Es útil medir la concentración de calcitonina para los fines del diagnóstico y para el seguimiento del resultado del tratamiento.
Habitualmente aparece como una masa dura en el cuello o la tiroides, a menudo con afectación ganglionar y también se diagnostica mediante una biopsia por aspiración con aguja fina. Por lo general, el análisis citológico revela tumores hipercelulares con células fusiformes y adhesión precaria. Se encuentran metástasis en ganglios linfáticos regionales en casi el 50 % de los casos.
La supervivencia general de los pacientes con carcinoma medular es del 86 % a los 5 años y 65 % a los 10 años y el pronóstico se relaciona con:
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Extensión de la enfermedad en el cuadro clínico inicial.
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Presencia o ausencia de metástasis en ganglios linfáticos regionales.
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Extensión de la resección quirúrgica.
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Edad avanzada
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Síndrome MEN2b
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El tratamiento consiste en tiroidectomía total, a menos que se compruebe metástasis a distancia. En los pacientes con carcinoma medular clínicamente palpable, la incidencia de ganglios linfáticos con compromiso microscópico es de más de 75 %. Por lo general, se hacen disecciones centrales ordinarias y bilaterales modificadas del cuello. Cuando el cáncer está confinado a la glándula tiroidea, el pronóstico es excelente.
La radioterapia se ha empleado como paliativo para tumores con recidiva local o en casos de resecciones incompletas, tumores irresecables o afectación ganglionar locorregional con extensión extracapsular.
Las dosis y volúmenes recomendados son semejantes a los empleados en el tratamiento de los tumores diferenciados